ANÁLISIS | GP de España 2022: “MÁXimo LÍDER”

 La sexta cita del calendario se desarrolló bajo estas 5 claves:

‘Checo’ Pérez, Max Verstappen y George Russell en el podio del GP de España


Gol de Verstappen, asistencia de Pérez

Se nos empiezan a acabar los calificativos para este hombre. Y no, no es un piloto cualquiera, es el súper piloto que ha conseguido ganar todas las carreras en las que no ha tenido que abandonar. A las victorias de Arabia Saudí, Imola y Miami tenemos que sumar la cosechada este fin de semana en suelo español. Es por eso que Max, a pesar de los abandonos de Bahréin y Australia, se coloca por primera vez esta temporada en la primera posición del campeonato de pilotos con 110 puntos, 6 más que Leclerc.

Si en Miami decíamos que tuvo que trabajarse más la victoria, en el circuito de Cataluña se encontró con un verdadero safari de experiencias. Primero, en la curva 4 de la novena vuelta, sufrió una salida de pista debido al viento de cola que corría mientras perseguía a Leclerc. Eso le arrastró hasta la espalda de George Russell, al cual no le tembló el pulso al luchar contra todo un campeón del mundo. Segundo, dicha batalla se fue alargando porque al neerlandés le fallaba el sistema de apertura del DRS, lo que le impedía adelantar al británico al final de la recta principal, aunque acabó delante gracias a la ventaja de su estrategia.

Sin embargo, si hay alguien al que debemos felicitar, ese es Pérez. El mexicano pidió intentar adelantar a George tras los intentos fallidos de Max. ‘Checo’ sólo tardó una vuelta en adelantarlo, colocándose en 1º lugar. Aunque, dicha posición se la tuvo que ceder a su compañero debido a las órdenes de equipo. Por todo esto, el experimentado piloto de Red Bull debe sentirse orgulloso y vencedor moral del Gran Premio de España.



Ferrari, ¡espabila!

Si al principio de temporada comentábamos que la escudería de Maranello parecía perfecta, sin fallos, rápida (o al menos competitiva) en todas los circuitos, sin problemas más allá del famoso ‘porpoising’ y con unos pilotos inspirados, esas condiciones han cambiado de forma radical. Los problemas no tardaron en llegar a Barcelona, ya que, en la vuelta 28, Charles Leclerc sufrió el fallecimiento de su motor. Este inconveniente suponía el primer gran fallo de fiabilidad de Ferrari en todo 2022. De esta forma, tras haber marcado el mejor tiempo el sábado y liderar toda la carrera, el monegasco experimentaba lo que le sucedió a Verstappen en Bahréin y Australia.

Los problemas no acabaron aquí, y es que, en la salida, el pedal del embrague del coche de Carlos patinó y le hizo caer de la tercera a la quinta plaza. Un mal reparto del diferencial y, de nuevo, el viento de cola le expulsaron de la pista y cayó hasta la 11º posición. Finalmente pudo remontar y acabar en la cuarta plaza. Un resultado que sabe a poco debido a las circunstancias de correr en casa, de haber podido luchar por la victoria tras el abandono de su compañero y los problemas de Max y tras haber visto cómo más de 120.000 personas le apoyaban desde el circuito. Ferrari necesita volver a su versión del inicio de temporada y sus pilotos también.



¡Qué bueno es Russell!

Ya veníamos comentando que el novato de Mercedes estaba siendo, debido a las circunstancias de correr con un coche con un gran margen de mejora, el piloto más regular de toda la parrilla. George estaba cuajando un gran inicio sin haber conseguido ninguna victoria pero ayer se volvió a evidenciar que no necesita ganar para demostrar que es un gran piloto. Es cierto que la pelea que tuvo con Verstappen estuvo condicionada por los fallos del DRS del pupilo de la bebida energética, pero aún así, sus duelos, su espíritu de lucha y su gran capacidad de pilotaje le permitieron ser 3º y conseguir de esta forma su segundo podio del año para seguir cuarto con 74 puntos.

El otro británico de Mercedes tampoco lo hizo nada mal. Lewis Hamilton salía 6º en parrilla pero un toque con Magnussen en la primera vuelta le provocó un pinchazo por el que cayó hasta la penúltima posición. El propio heptacampeón insistía en retirarse y guardar el motor pero Bono, su ingeniero, le borró esa idea de la cabeza y le motivó a seguir corriendo y aprovechar las posibles oportunidades que les brindara la carrera. Pues, a pesar de la ausencia de un Safety Car, Hamilton remontó de forma épica, aunque un fallo del combustible en las últimas vueltas le condenó y acabó 5º.



Alonso, 11 aperitivos

La mala noticia para nosotros llegaba el sábado, cuando en la Q1 se produjo la descalificación de Fernando Alonso por no disponer de tiempo suficiente para realizar un segundo intento debido al tráfico de las últimas curvas. El asturiano sólo pudo ser 17º, por lo que el equipo decidió montar su CUARTA UNIDAD DE POTENCIA en seis carreras a cambio de salir en la última posición. Ya desde el previo Fernando dejó caer que la estrategia era correr al ataque para intentar alcanzar la zona de puntos.

Pues bien, tras una salida y una primera vuelta que ya le colocaban 15º, Alonso empezó una masterclass de conducción sobre la parrilla media y se libró de Gasly, Vettel y Ricciardo sin muchos problemas. El bicampeón no dejó de remar a contracorriente con la intención de sumar la mayor cantidad de puntos posibles, pero, nuevamente, una última parada de 6 segundos le arrebató la posibilidad de luchar por mejores posiciones. Finalmente, acabó con un balance de 11 adelantamientos que le dejaron sin la posibilidad de aspirar a algo más pero que le hicieron terminar noveno, con lo que sumó 2 puntos.



Notable para Montmeló

La última carrera, que se había disputado en Miami, estuvo condenada por el final descafeinado que tuvo. Solo había que mirar el calendario para saber que, al menos, las dos siguientes carreras en España y Mónaco no serían el súmmum del entretenimiento. Pues bien, estábamos equivocados. Durante muchos años, Montmeló había sido considerado uno de los circuitos más aburridos del calendario, aunque ayer, de forma sorprendente, y sin la presencia de ningún incidente ni Safety Car, acabó terminando como la carrera más interesante de todo lo que llevamos de 2022.

Eso sí, no debe ser calificado con una mayor puntuación ya que, a pesar de acoger en todo el fin de semana a casi 300.000 personas (récord desde 2008), las infraestructuras desplegadas por parte de la organización dejaron bastante que desear. Desde fondos y gradas que soportar sin sombra ninguna más de 37º C durante 8 horas, hasta accesos y movilidad muy complejos, pasando por problemas de tráfico en los aledaños del circuito. No nos carguemos el espectáculo de acoger un Gran Premio en casa, ahora que, después de tanto años, ha vuelto la ilusión de la F1 a nuestro país.


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